Cuando en un piso pequeño no hay orden, genera un Sha Chi, que es un chi negativo, provocando a los miembros que viven en el piso, sensación de ira, ansiedad, dispersión, y en sí, inestabilidad. Por ello, es importante mantener el orden siempre y que cada objeto tenga su lugar.
Si eres de las que suelen acumular objetos, es hora de animarse y hacer una liberación de todo aquello que ya no le des uso o no funcione. Cuando realizamos este paso, liberamos nuestra energía, dejando entrar a lo nuevo. Estamos renovamos el chi para que fluya de nuevo correctamente.
Así que nada de cajones, muebles o espacios con trastos. Es hora de liberar tu espacio.
Cuidado con los excesos:
Cuando los pisos son pequeños, siempre aconsejamos de introducir colores claros, como los blancos. Los espacios «only white» son preciosos e ideales para generar sensación de amplitud, PERO, corremos el riesgo de crear exceso de elemento metal. Sí, el color blanco representa a este elemento y cuando nos excedemos de este, podemos provocar falta de calidez, transmitiendo esto mismo a los inquilinos, frialdad ante sus relaciones. ¿Cómo equilibrarlo para transmitirnos esa calidez que falta en espacios muy blancos y neutros? Con elemento madera, ya sea introduciendo muebles en este acabado, madera en su estado más natural como en colores; verdes, tostados. Y añadir una pincelada de color cálido, aunque sea en algún detalle para lograr esta calidez sencilla en espacios más blancos.
Vamos ahora con el ejemplo contrario, si te encanta introducir colores en tu decoración, evita crear excesos. Por ejemplo, exceso de elemento fuego, si añadimos mucho color rojo, naranja, alimentamos en exceso la energía yang, generándonos mucha actividad, ira y nerviosismo.
Siempre busca el equilibrio:
Añade colores claros para tus paredes, los cálidos como los beige o colores pastel muy suave darán sensación de amplitud y calidez. Con ellos, la energía será más armoniosa.
Si quieres destacar una pared, puedes subir el tono del color o añadir un papel decorativo que vaya con el resto de la decoración. Siempre guardando armonía y equilibrio. Intenta buscar el menos es más.
Sí, los espejos nos ayudan a amplificar la luz y a crear efecto óptico de amplitud visual, pero tenemos que saber dónde sí y dónde no, para no provocar un mal feng shui.
Teniendo en cuenta estas claves, sabrás dónde sí y dónde no con mayor claridad.
Un mueble con curva redondeada fomenta más el feng shui y además, transmite ligereza visual en el espacio.
Puedes elegir mesas auxiliares redondas, por ejemplo, para las de enfrente de la TV y puf para crear este efecto.
El chi será favorecido y la ligereza visual también.
No te olvides de decorar tus paredes, no se trata de dejarlas ni desnudas ni dejarlas abarrotadas de cuadros o detalles. Encuentra el equilibrio, las paredes tienen que respirar sin ser aglomeradas de objetos o mobiliario.
Si es importante decorarlas, para que la energía no fluya solo por debajo. Puedes decorarlas añadiendo un gran cuadro o combinación de cuadros, espejo o incluso baldas con libros y cuadros apoyados sobre ellas, PERO siempre encuentra el equilibrio para que respiren. Fluirá mejor el chi.
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Nos vemos en el siguiente post.
Esther Puche